Nuestro buen amigo Dictinio de Castillo nos encargó la elaboración de una marca personal que englobara todo el abanico profesional, desde su trayectoria en la arquitectura como su faceta más artística y plástica. Se trata de un proyecto muy ambicioso donde se explora una parte identitaria muy personal, y a su vez, la necesidad de un branding profesional muy marcado por su visión de trabajo y su sensibilidad artística en el mundo del dibujo y la pintura.
La solución a este reto está basada en la polivalencia, la elasticidad gráfica y en la exploración de la forma como motor visual. Una marca que ofrece un punto de vista relativo en cuanto a la forma, con alusión a Maurits Cornelis Escher, y sus “formas imposibles”. Un referente que en el mundo de la arquitectura como en el plano plástico es perfectamente aplicable y argumentable.